Premios Príncipe de Asturias 2008

Crisis financiera, globalización y lucha contra el cambio climático, protagonistas

El Príncipe de Asturias apeló a "un gran esfuerzo de cooperación mundial" para afrontar con determinación los retos del futuro. Don Felipe reflexionó sobre las consecuencias de la globalización y se mostró convencido de estar "ante un nuevo mundo más ancho y más complejo".

Ante la crisis financiera, Don Felipe consideró que ésta ha puesto de relieve tanto la verdadera amplitud de la globalización "como la necesidad urgente de superar los grandes riesgos y desafíos que plantea esta comunidad global que estamos construyendo". En su opinión, resulta "imprescindible" que las instituciones "ordenen y regulen la globalización para ofrecer una mayor confianza y esperanza a todos los habitantes del planeta".

La escritora canadiense Margaret Atwood, que habló en nombre de todos los premiados, también se refirió durante su intervención a la situación de crisis financiera actual y al cambio climático en el que a su juicio "nos hallamos inmersos". "Es preciso que nos reimaginemos a nosotros mismos. Y no sólo a nosotros mismos, sino nuestra relación con el planeta que nos sostiene", dijo Atwood.

La emotiva gala celebrada en el teatro Campoamor de Oviedo, bajo la presidencia de los Príncipes de Asturias, arrancó con el recibimiento de los galardonados, que uno a uno fueron subiendo entre aplausos al escenario. Después, en el momento de la entrega de los galardones, el de los Deportes, Rafael Nadal y el de la Concordia, Ingrit Betancurt, se llevaron las mayores ovaciones del auditorio.

Precisamente, Ingrid Betancourt protagonizó uno de los momentos más emotivos de la gala durante la lectura de su discurso que tuvo que interrumpir por las lágrimas que le asaltaron en más de una ocasión obligándole a entrecortar la lectura. Betancourt afirmó que no se sentirá "totalmente libre ni feliz" mientras tenga compañeros presos en la selva por las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).

También el tenista Rafael Nadal se emocionó cuando el Príncipe, durante su discurso y en presencia de la familia del deportista, ensalzó tanto sus méritos profesionales como personales.

José Antonio Abreu también arrancó un fuerte aplauso del público cuando se levantó a recoger el premio Príncipe de Las Artes acompañado de cuatro miembros de las formaciones musicales, dos de ellos de la orquesta infantil y otros dos de la juvenil.

ASISTENCIA

Los galardonados estuvieron arropados durante la ceremonia por una amplia representación institucional y de autoridades internacionales de diferentes ambitos. El Gobierno español estuvo representado por los Ministros de Educación, Mercedes Cabrera; la de Ciencia e Innovación, Cristina Garmendia y el de Asuntos Exteriores, Miguel Ángel Moratinos. Además de los Príncipes de Asturias, en representación de la familia real acudió como cada año la Reina Doña Sofía que ocupó su palco de honor en el Campoamor.

En la lista de autoridades destacaba además la presidenta del Tribunal Constitucional, María Emilia Casas, el presidente de Cantabria, Miguel Ángel Revilla, el presidente de Baleares, Francesc Antich y el ex presidente de la Xunta de Galicia y senador Manuel Fraga, además del Gobierno regional con el presidente Vicente Álvarez Areces a la cabeza, y representantes de las principales instituciones autonómicas.

En la ceremonia de entrega también estuvieron presentes una amplia representación del cuerpo diplomático, así como del mundo empresarial, entre estos últimos el presidente de Repsol, Antonio Brufau, o la empresaria Ana patricia Botín.

AMBIENTE EN LAS CALLES.

La entrega de los Premios Príncipe de Asturias congregó en las calles a cientos de personas para ver el paso de la comitiva desde el Hotel de la Reconquista hasta el Campoamor. Varias pantallas gigantes instaladas en las calles hicieron posible que el público pudiera seguir la llegada de los galardonados así como de las autoridades y el transcurrir de la gala. Decenas de gaiteros tocaron también en las calles durante casi todo el día.

Los premiados fueron aclamados a la entrada del teatro al igual que a algunos de los invitados, como el presidente de Cantabria, Miguel Ángel Revilla, un clásico ya en estos galardones. El tenista Rafael nadal, Premio Príncipe de Asturias de los Deportes y la Premio Príncipe de Asturias de la Concordia, Ingrid Betancourt, fueron los galardonados más aclamados por el público, tanto a su salida del hotel como a su llegada al Campoamor.