La Policía aísla los actos oficiales de las protestas de la izquierda

La Policía levantó ayer un cordón de seguridad para aislar los actos de los Premios Príncipe de Asturias de las protestas ciudadanas convocadas por distintos colectivos de izquierdas, que continuarán hoy con la reunión en Oviedo de las cinco columnas de la llamada "Marcha de la dignidad" y con una concentración de trabajadores afectados por la crisis, que tendrá lugar en la Plaza de la Escandalera. El operativo policial fue cuestionado por "excesivo" por los convocantes de las protestas. Centenares de personas prologaron los actos programados hoy como alternativa reivindicativa a los premios "Príncipe de Asturias" con charlas en el campus del Milán y un mítin en el Corredoria Arena.

"Los premios Príncipe de Asturias son la nueva Escopeta Nacional (...) Quino estará con los Reyes pero Mafalda estará con nosotros", arengó Juan Carlos Monedero, uno de los líderes de Podemos, al millar de ciudadanos que llenó el el Corredoria Arena y hasta se quitaron las zapatos para acceder a la pista, donde estaba la tribuna de oradores, desde la que también intervinieron Lara Hernández (IU), muy aplaudida al recordar la Revolución de Octubre de 1934, Sabino Cuadra (Amaiur) y Magdalena Martínez (Frente Cívico). Antes y repartido en ocho aulas del campus del Milán, en otras tantas charlas simultáneas, un público heterogéneo y transversal en edad, pero mayoritariamente joven, escuchó a más de treinta ponentes exponer teorías sobre economía, política migratoria, educación, conflictos sociales, medidas para frenar desahucios y hasta el derecho a decidir. En las tarimas de las clases, casi todas rozando el lleno, disertaron profesores, economistas y abogados, líderes sindicales y políticos de izquierda llegados algunos de ellos, igual que parte de su auditorio, de diferentes puntos de España.

"Nos llena de orgullo y satisfacción acogeros", recibió a los foráneos en una de las charlas el exconcejal del Ayuntamiento de Oviedo Celso Miranda. De analizar las respuestas a los conflictos sociales en marcha se encargó, entre otros, Diego Cañamero, dirigente del Sindicato Andaluz de Trabajadores (SAT), en una de las reuniones más multitudinarias. En el territorio de la economía, el economista Eduardo Garzón, hermano del diputado de IU Alberto Garzón, aventuró un cálculo propio de lo que le costaría al Estado emplear a los 5,5 millones de parados. "Con un sueldo de entre novecientos y 1.200 euros", afirmó, "el coste neto sería del 2,88 por ciento del PIB, menos de lo que se paga cada año por los intereses de la deuda pública".

Veto de IU y Podemos

La eurodiputada asturiana de Podemos, Tania González, y los tres concejales de IU en el Ayuntamiento de Oviedo -Roberto Sánchez Ramos, Emilio Huerta y Alejandro Suárez- rechazaron sus invitaciones a la ceremonia de los premios y se sumarán a las protestas. Diego Díaz, integrante de Somos Reales, y Marco Antuña, de los empleados de Liberbank, cuestionaron el dispositivo policial del que responsabilizaron al delegado del Gobierno, Gabino de Lorenzo, y al alcalde, Agustín Iglesias Caunedo. "Generan alarmismo, Nos presentan como bárbaros del Norte para meter miedo y desmovilizar. No es normal este despliegue", dijo Díaz.