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La Max Planck lamenta la situación de la ciencia en España al recibir el premio

El presidente de la sociedad científica alemana, Peter Gruss, agradece un galardón «que reconoce nuestro esfuerzo»

Jueves 13 de Junio de 2013
Pilar Rubiera

En enero de 2011 la Sociedad Max Planck para el Avance de la Ciencia, referente mundial en la investigación científica, conmemoraba en la Academia de las Artes de Berlín la creación, en 1911, de la Sociedad Káiser Guillermo, de la que surgiría, en 1948, la actual Sociedad para el Avance de la Ciencia. En el acto, el antiguo canciller alemán Helmut Schmidt afirmó: «Las élites tienen una responsabilidad especial con la humanidad».

Y en esta misma línea, el presidente de la institución, Peter Gruss, subrayaba que la investigación científica no debía «volver a exceder jamás» los límites de la ética, en referencia a la implicación de la Káiser Guillermo en el nazismo. Desde 1948, como recordó ayer el jurado que concedió el «Príncipe» de Cooperación Internacional a la Sociedad, «trabaja bajo el ideario de la excelencia».

Los alemanes lideran en Europa la inversión en investigación y, ayer, la red de 82 institutos científicos que constituyen la Sociedad Max Planck se alzó con el galardón. El jurado, presidido por el jurista y político asturiano Gustavo Suárez Pertierra, valoró la «vocación europea» de la sociedad, su «planteamiento interdisciplinar» y la «estrecha cooperación entre centros de investigación y universidades de todo el mundo con los que trabaja la red Max Planck, generando equipos de jóvenes científicos altamente cualificados y comprometidos con las áreas de investigación más punteras que se desarrollan en el mundo».

El presidente de la sociedad, el biólogo celular Peter Gruss, afirmó en un comunicado que se siente «extremadamente honrado y feliz» por el «prestigioso premio», que reconoce «nuestro trabajo y nuestro esfuerzo para hacer avanzar la ciencia en todo el mundo».

Gruss se enteró de la buena noticia cuando se dirigía al aeropuerto de Múnich para volar a Berlín. «Cuando uno ve la lista de las personas y las organizaciones que lo han recibido se llena de respeto hacia el premio», declaró a «Efe».

El presidente de la Max Planck lamentó los recortes a la investigación en España. «Es algo muy triste, conozco científicos españoles excelentes que no tienen condiciones para investigar, y lo peor es que muchos tienen que terminar marchándose de España», añadió.

También el español Juan Ignacio Cirac Sasturain, director de la división teórica del Instituto Max Planck de Óptica Cuántica de Múnich, «Príncipe» de Investigación en el año 2006 y miembro de ese mismo jurado en los últimos años, declaró sentirse «un privilegiado» por trabajar en la Max Planck, por «las óptimas condiciones que ofrece para la investigación».

La candidatura de la sociedad científica fue presentada por Pedro Miguel Echenique, «Príncipe» de Investigación en 1988. A la última votación llegó, además de la Max Planck, la candidatura del obispo asturiano en Camboya Enrique Figaredo, que contaba con numerosos apoyos en el jurado. El ganador lo fue por ocho votos, frente a seis del otro finalista.

Los 82 centros desarrollan investigación básica en ciencias naturales, ciencias sociales y humanidades. En la última clasificación de instituciones de investigación no universitarias de la revista «Times Higher Education Supplement», en 2006, la Max Planck era la número 1 en investigación científica y la 3 en investigación tecnológica.